Hoy toca tema relaciones.
Todo tiene que ser más sencillo de lo que la mente rebuscada te dice que es.
Vamos a intentar clarificarlo todo (al menos desde mi punto de vista, claro), para ayudarnos en la toma de decisiones «decisivas».
Pongamos el caso de que te encuentras en una relación y te das cuenta de que no obtienes de la otra persona lo que esperabas, ya sea porque «antes sí pero ahora no», ya sea porque te cansaste de esperar de si por fin llegaba a darte lo que querías, o decenas de opciones más.
Primero de todo, observemos que en realidad en las relaciones somos muy egoístas. Si no recibimos lo que pedimos, a la larga nos alejamos de esa persona, aunque se conviva con ella años y años. Es casi como una práctica generalizada y aceptada a nivel colectivo.
Pero seamos más prácticos y amables con todo esto: si hablamos de amor real, amas sin esperar nada. Lo que te llena es ese amor que sientes hacia la otra persona, y no lo que la otra persona haga o sienta hacia ti. Con ello, las expectativas desaparecen y lo que queda es bienestar. Sea como sea esa relación. Incluso si es tsn solo imaginada.
Por otro lado, cuando honestamente aceptamos de que no nos encontramos en ese tipo de amor tan elevado en el que no existen condiciones, sino más bien un continuo «acción-reacción» más o menos agradable entre los dos, cuando algo falla puede ser por lo siguiente:
- Ya no te llena o compensa la acción o la reacción del otro hacia ti, incluso si es por indiferencia o por exceso de atención.
- Tu atención está en otro tema, sea otra persona o no, o por otro asunto que no tiene que ver con las relaciones sino con uno mismo.
Está claro que pueden haber más opciones, pero quedémonos con estas dos.
Bien, no entres en bucle. Toma una decisión: acepta la relación tal y como es o déjala ir. Pero hazlo siempre desde el propio respeto por tu camino y por el del otro. No tienes ni idea de lo que tú o el otro debe vivir y experimentar para avanzar.
Si aceptas seguir con esa persona, asegúrate de que no seas tú el que «no está por la labor». Tampoco confundas «aceptar»con «conformarse». En la primera hay plenitud y en la segunda resentimiento y vacío.
Sonia Coll
Comunicadora terapéutica, canalizadora, formadora y escritora.
Mi servicio es comunicar y acompañar en los procesos de cambios evolutivos. Como facilitadora transmito, activo y ayudo a integrar aquel conocimiento que permitirá a la persona una evolución en consciencia, tanto a nivel espiritual como en lo cotidiano, y lo llamo Sanación por Consciencia.
A su vez, toda la formación que ofrezco gira también entorno a adquirir una visión más elevada de la vida, facilitando así el bienestar ante cualquier desafío que aparezca.