Si simplemente aceptas tus días bajos al igual que aceptas tus días altos, facilmente te permitirás admitir que, en este mundo, ocurre tanto lo blanco como lo negro por igual y que se va de un color a otro con tanta rapidez casi que como se llega.
Dejar de luchar por salir de un estado emocional concreto, te libera de creer que puedes controlar lo externo. Esa lucha no te sirve de nada. Es mejor llevar la situación delante de ti para prestarle toda la atención posible, que negarla o disimularla con algún truco de «escapismo».
Lleva esa carga emocional a tu territorio: a tu decisión de observarlo conscientemente.
Darle a todo su justa importancia, sintiéndolo y soltándolo después, te ayuda a no tener que dedicarte a juzgarlo para encontrar argumentos que justifiquen ciertos malestares, lo que sólo conseguiría que no terminaras de desapegarte de lo acontecido.
Llora y enfádate o ríe y abraza. No importa. El ser humano lo vive todo. Tan solo recuerda que todo aquí cambia rápidamente.
Tarde o temprano, todo se mueve. Al igual que lo hace el cielo de la noche a la mañana y a la inversa.
Sonia Coll
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Comunicadora terapéutica, canalizadora, formadora y escritora.
Mi servicio es comunicar y acompañar en los procesos de cambios evolutivos. Como facilitadora transmito, activo y ayudo a integrar aquel conocimiento que permitirá a la persona una evolución en consciencia, tanto a nivel espiritual como en lo cotidiano, y lo llamo Sanación por Consciencia.
A su vez, toda la formación que ofrezco gira también entorno a adquirir una visión más elevada de la vida, facilitando así el bienestar ante cualquier desafío que aparezca.